El Scout:

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1. Es leal

   • Vive la estabilidad por la que se mantiene fiel su promesa.
      

2. Es digno de confianza

   • Despierta confianza en sus relaciones de amistad y con el grupo, ya que muestra honestidad y seriedad en todo su quehacer.
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3. Sirve sin esperar nada a cambio

   • Está siempre disponible al servicio de los demás imitando a Cristo, que no ha venido a ser servido sino a servir.

   • Está atento a acoger a los menores desarrollando el espíritu de tutor y a salir al encuentro de los más necesitados.
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4. Comparte con todos y se une a la comunidad

   • Colabora con la construcción de la comunidad uniéndose de mente y corazón a su cultura particular.

   • Es generoso y solidario en la acogida a los demás sirviéndolos con sus bienes materiales y espirituales.
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5. Es alegre y cordial

   • Busca desarrollar la amistad en el espiritu Scout.

   • Es alegre en toda circunstancia porque sabe que su vocación Scout es un regalo de Dios para su vida.
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6. Cuida la naturaleza porque en ella encuentra a Dios:

   • Vive y promueve el cuidado de la Naturaleza en los distintos ámbitos donde se desenvuelve.

   • Descubre en la naturaleza la presencia creadora de Dios.
      

7. Sabe obedecer y nada hace a medias

   • Vive en obediencia a sus superiores y a partir de la escucha benedictina.

   • Cumple con los trabajos encomendados y persevera en ellos hasta terminarlos.
      

8. Es optimista para enfrentar las dificultades

   • ​Acepta las contrariedades y sus propias limitaciones confiando en la acción de Dios.

   • Es paciente y humilde.
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9. Cuida las cosas y valora el trabajo

   • Desarrolla el cuidado por las cosas propias, comunitarias y ajenas.

   • Valora el trabajo
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10. Es puro de pensamiento, palabra y obra

    • ​Evita la murmuración, buscando pensar y hablar bien de los demás.

    • Valora y busca la verdad.

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Fuente: (Documento Scout de Manquehue)